Palabras escritas en el viento: octubre 2024

lunes, 28 de octubre de 2024

En tus sueños.

En tus sueños, soy la princesa que no necesitaste liberar, la que corría a tu lado por el mundo. La que no te ofrecía un reino, sino paz

En tus sueños, eras el principe que no tuvo que salvarme de ningún monstruo, que reía sin miedos, el que se sentaba, a mi lado, a la orilla del camino a contar flores.

En tus sueños, éramos libres, etéreos, simples y no había nada que nos impidiera estar juntos. El mundo era un lugar seguro y solo los habitábamos tu y yo.

En tus sueños, no había compromisos, ni leyes, ni ataduras. Solo caminos por recorrer.

Pero tus sueños terminaban al despertar. Y yo ya no estaba a tu lado contando flores. Y tú ya no sonreías en libertad. Y tenías ataduras. Y había leyes que cumplir. Y compromisos.

Por eso yo quedé atrapada en tus sueños. Porque el mundo no tiene un espacio para un "nosotros", somos simplemente dos extraños, quizás intentando cumplir la promesa de otra vida.

Y porque tus sueños son en el único lugar en el que te das permiso para ser libre. Por eso es en el único lugar en el que me vas a encontrar.

En tus sueños.

Imagen generada por inteligencia artificial

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domingo, 27 de octubre de 2024

No lo extrañas a él.

No, no es a "él" a quien extrañas. Es a esa mujer en la que te convertiste mientras estabas con él.

Extrañas a la leona, capaz de todo, que descubriste que eras.

Extrañas a la guerrera, dispuesta a luchar a su lado, hombro con hombro, que salió desde mi más profundo de tu ser.

Extrañas la dulce sensación del deseo recorriendo tus venas, la explosión de placer que se producía en cada encuentro, la liberación que te permitiste por primera vez en tu vida...

No, a él no lo extrañas. Él fue solo el camino para que te encontrases con esa diosa que habita en vos, que mantenidas escondida por mandato, por pudor, por recato...

Lo que extrañas es haberte abierto, haber volado y descubierto lo maravillosa que eras, con la idea de que todo eso, lo hacías por él. Y, no, era ella, tu amazona interior, que pedía a gritos ser liberada.

Si, ahora te queda la sensación que te cortaron las alas, que el cielo es gris, que la vida ha perdido sus colores y pensas que eso era por alguien que no sypo valorarte.

No, todo eso lo creaste vos. Ese mundo maravilloso, esa energía, esa vida, salió de tu ser. Mantén viva a la diosa, rescatá a la amazona, no las dejes en un rincón oscuro y olvidado.

Enamorate de vos, de todo lo que sos capaz de hacer, de la magia que desplegas cada vez que quieras cambiar el mundo.

No, no lo extrañas a él. Te extrañas a vos misma, cuando decidiste ser libre.

Imagen generada por inteligencia artificial

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jueves, 24 de octubre de 2024

Que no te roben las ganas.

Que no te roben las ganas. Que nadie te diga cuántas veces podés golpearte. Que no te cuestionen si volviste a confiar, a creer.

Que no te roben los sueños. Que no se atrevan a juzgar tus intentos. Que nadie sabe lo valiente que hay que ser para volver a volar, cuando se tienen las alas rotas!

Que no te roben la ilusión. Que no te digan que ya está, que no insistas, que no hay nada para vos. Que no se atrevan a decirte que seas más simple, más común. Que no te pidan que cambies.

Que no te roben la paz. Que si para alcanzar algo tenés que disfrazarte, mentir, ocultar eso que "asusta", porque la felicidad no se alcanza con el engaño.

Que nadie se atreva a pedirte que bajes de tu nube, porque no saben en qué cielo podés encontrarte a alguien que encaje con vos, que sea esa otra mitad perdida,.

Que no te hagan cruzarte de vereda, porque no soporta que vos sí busques la felicidad y ellos sea conformistas, Pero infelices, para acomodarse a un molde.

Viví, sé feliz, tropezate las veces que sean necesarias, caete, levantate y volvé a caminar. En alguna esquina está ese sueño que te persigue por las noches, en algún rincón está ese ser que te complete, en algún camino lo vas a encontrar...

Y si eso no pasa, no importa, al menos fuiste fiel a vos mismo/a, intentando ser feliz cada dia de tu vida. Y la felicidad, no siempre está al lado de alguien. Pero si está dentro de uno mismo!!

Imagen generada por inteligencia artificial

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viernes, 11 de octubre de 2024

Después...

"Después te llamo". Y entre una cosa y la otra, el tránsito, el ajetreo, otras llamadas, nunca le devolvieron la comunicación. Y se quedó esperando, sin insistir, porque no quería molestar, ni interrumpir algo importante...

"Después te escucho". Y el audio de la aplicación quedó en un triste gris, sin saber si la otra persona había cambiado la configuración, pero sin una sola palabra de consuelo, apoyo, o consejo. Quizás, tal vez, no sabía qué responderle y por eso eligió el silencio...

"Después hablamos", y cerró la puerta, yendo Dios sabe a dónde y dejando en ascuas las ganas de contarle eso que le atormentaba el alma, que le quitaba el sueño, que le aturdía el pensamiento...

Y ese después se convierte en nunca, porque el momento de valentía para decir eso que atraviesa la garganta era ése; porque el coraje que necesitó para poner en orden las palabras y confesar sus peores pesadillas había desaparecido; porque la confianza para animarse a decir algo que te atormenta se licúa y desaparece en un suspiro.

Y, después, es tarde. Después no llega jamás. O, cuando se comprende lo que encerraba esa mirada llena de miedo, de dudas, de necesitar abrirse a alguien para que la bomba no explote por dentro, para poder contener ese dolor, esa desesperación , esa angustia, ya no sirve de nada...

Después queda un camino lleno de vacios, de sinsabores, de recuerdos en dónde nos damos cuenta de todos los avisos que nos daban...

Después quedan las lágrimas, la culpa, el dolor, las preguntas que nadie puede responder. Después, queda la soledad.

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domingo, 6 de octubre de 2024

Presencias...

Y de repente, aparecés, cuando menos me lo espero, en los rosales que regalaste, en los gajitos que repartiste, en las semillas que ayudaste a plantar.

Y creo que me enviás un mensaje, que estás ahí, dando vueltas, alegrando la vida de otros, quizás diciéndome que me estás sonriendo en cada rincón de la ciudad.

Te extraño, como un tronco extraña su raíz, porque la necesita para vivir, para que la sangre fluya, para que los pulmones de llenen de ese aire que solo junto a vos podia respirar.

Y te necesito, porque a veces no se cuál es el camino a seguir, porque enfrente solo tengo bruma y niebla, y no veo si hay tierra o abismos.

Y estás en los recuerdos que tantos otros tienen de vos. Los que te conocieron a través de mis ojos y aprendieron a amarte. Estás en todas las personas que te lloraron, que te amaron, que aún te piensan y te guardaron en su corazón.

Sé que estás, cerca mío, cuidándome. Pero a veces quisiera volver a verte a vos, abrazarte, tocarte, sentir tu perfume y verme en tus ojos, una sola vez más. Acurrucarme en tu regazo y volverme chiquita, que me acarices el pelo y sentir que eso es la paz.

Y tengo que conformarme con oler esas rosas que sembraste por la ciudad, como huella de tu amor...

Imagen propia (gracias, Guillermo y Nani!).

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