domingo, 17 de febrero de 2019

Viaje.



Primero fue tu mano la que me guió por un sendero desconocido. Luego fue tu voz, llegando a zonas ignoradas de mi ser. Tu aroma vino después, que despertó algo profundo y dormido dentro de mí. 

Tu sonrisa me invitó a pasear por las nubes y fue tu abrazo el que me hizo descubrir que el cielo podía tocarse con las manos.

Y fue tu beso el que me hizo viajar al infinito, olvidando todo lo que había dejado atrás.

No hay comentarios:

Publicar un comentario